René Alejandro
Pontoni
El Mago Pontoni (otro de los
apodos de René) fue sinónimo de excelencia, un centrodelantero de una
virtuosidad difícil de igualar.
Con
categoría de grande en la forma de pararse, de caminar la cancha, con la
verdadera inspiración del potrero a la hora de utilizar la fuerza o el efecto
que traía el balón para tocar de primera o para desairar a su marcador.
Llegó
a San Lorenzo en 1945 luego de su brillante actuación con la camiseta nacional
en el Sudamericano de Chile, para mostrar toda su magia con la gloriosa
camiseta azulgrana.
La
operación se llevó a cabo con Newell´s en cuarenta mil pesos más los pases de
Mario Fernández y José Arnaldo.
El
debut de Pontoni no pudo ser mejor, fue ante Gimnasia en La Plata, ganando San
Lorenzo 4 a 1 con tres tantos suyos.
Su
calidad magistral encontró eco en otros dos brillantes delanteros: Rinaldo
Martino y Armando Farro, los tres hicieron exhibiciones que aún están en la
memoria de los aficionados de aquella época, formando para la posteridad “El
Trío de Oro” que llegaron a arrancar aplausos hasta de las hinchadas rivales.
Junto
a “Mamucho” realizaban los llamados cruces –cortinas con los ojos cerrados, es
que jugaban de memoria y esto enfervorizaba más a la hinchada azulgrana.
Llegó
el año 1946 para conformar un equipo memorable y lujoso que pasadas las
seis décadas es reconocido como uno de los mejores conjuntos de todos los
tiempos del fútbol nacional. San Lorenzo ese año se transformó en el posgrado
del fútbol bien jugado.
Hay
muchas tardes memorables en la carrera de René Pontoni, pero para los tiempos
quedó aquel 20 de octubre de 1946 en el Gasómetro, donde se
convirtió en un extra terrestre del balompié, cuando en una verdadera obra de
arte ante Racing “El Loco” Francisco De La Mata ejecutó un centro, la pelota
cayó en el medio del área académica, Pontoni de espaldas al arco sin dejar que
toque el balón el césped, la paró como un bailarín con la punta del botín,
acosado por los dos centrales Yebra y Palma, levantó la pelota, la mató con el
pecho, la volvió a dejar caer sobre la punta del botín derecho y ahí en un
alarde de malabarismo amagó salir por su derecha, pero con una media vuelta se
infiltró entre los dos zagueros que quedaron desairados y con un remate
esquinado sometió al arquero Ricardo convirtiendo el cuarto gol, toda la jugada
en pocos segundos Y SIN TOCAR EL PISO LA PELOTA EN NINGÚN MOMENTO. La
sorpresa fue tal en la hinchada de San Lorenzo, que tardó varios segundos en
gritar el gol, por no creer lo que acababa de observar.
Al
año siguiente aquel majestuoso equipo dirigido por Diego García y Pedro Omar,
llevará su magia al viejo continente, España y Portugal, serán testigos de una
brillantez nunca expuesta en sus campos de juego, porque el Ciclón de
Boedo con sus intérpretes dictó cátedra, aquel año 1947, fueron tiempos donde
llegaron invitaciones a la Secretaría del Club de todo el mundo para ver “Al
San Lorenzo”.
Aquella
inolvidable actuación ante el Seleccionado de Portugal, donde el conjunto
azulgrana se impuso por 10 a 4, tuvo la inolvidable anécdota en el Aeropuerto
de Lisboa al llegar la delegación. La prensa lusitana sorprendida por las
actuaciones de San Lorenzo en España, quiso crear un clima de
desafío y acosando a la delegación, preguntaba si el equipo azulgrana
repetiría dichas actuaciones, René Pontoni afirmó “Ganarán los
billaristas, haremos 10 carambolas” pero no se refirió nunca a conquistar 10
goles (así lo confesó años después), la prensa local dijo que René
Pontoni afirmó que San Lorenzo convertiría 10 goles.
Lo
concreto es que ante la Selección de Portugal (Pontoni hizo 4 goles) a seis
minutos del final “El Chueco” Farro convirtió el décimo gol, en ese momento
ingresó en reemplazo de René Alejandro Pontoni el jugador Aballay, y el
Maestro desde la línea de cal les pedía visiblemente a sus compañeros que no
hagan más goles para que su cumpla la profecía que la prensa puso en su boca.
Siguió
mostrando toda su clase hasta 1948, deleitó con su juego extraordinario
al hincha de San Lorenzo y el fútbol todo, para emigrar a Colombia tras el
éxodo de figuras del fútbol nacional en 1949.
Regresó
al Club en 1954, pero una lesión solo le permitió jugar un par de cotejos.
Tras
abandonar la práctica activa trabajó como técnico en el primer equipo y en las
inferiores, atrás quedaba la estampa de un grande, que en 1945 fue elegido por
una votación popular de todo el fútbol argentino como el mejor en su puesto de
todos los tiempos, relegando a grandes como Arsenio Erico y Adolfo Pedernera.
René
Pontoni, quien sigue siendo hasta hoy el más eficiente delantero de la Selección
Argentina en la relación partidos jugados-goles convertidos (19 en 20 cotejos)
fue una gloria de nuestro fútbol.
Posición: Centrodelantero / DT
Período: 1945-48 y 1954
Partidos jugados: 102
Goles: 66
Debut: 22 de abril de 1945 (Gimnasia LP 1 - San Lorenzo 4)
Como DT: 1955 y 1962
Nacimiento: 18 de mayo de 1920. Santa Fe, Argentina
Período: 1945-48 y 1954
Partidos jugados: 102
Goles: 66
Debut: 22 de abril de 1945 (Gimnasia LP 1 - San Lorenzo 4)
Como DT: 1955 y 1962
Nacimiento: 18 de mayo de 1920. Santa Fe, Argentina
Fallecimiento: 14 de mayo de 1983 (62 años)